Preparación de la cirugía en clínica dental

Preparación de la cirugía en clínica dental – 2ª parte

En este segundo post continuamos con la serie dedicada a la preparación de la cirugía en clínica dental que comenzamos en Preparación de la cirugía en clínica dental – 1ª parte.

El lavado con una solución alcohólica

Se realizará en lugares en los que no se dispone de grifo para realizar un lavado de manos. Ha de frotarse vigorosamente con la solución durante 30 segundos, si se secara antes habría que humedecerlas más.

Lavado quirúrgico

Se realizará antes de la cirugía. Consiste en la eliminación de tanto la flora residente como la transitoria.

Necesitaremos un grifo que se pueda accionar con el codo o con la rodilla o pie, un cepillo desechable, jabón antiséptico a base de povidona yodada o clorhexidina (los estudios demuestran que mejor con clorhexidina) y dos toallas estériles. Lo ideal es usar cepillos impregnados monouso.

Durante todo el procedimiento mantendremos las manos más altas que el resto del brazo. Así evitaremos que los microorganismos de la zona límite del codo recolonicen la zona limpia.

  1. Abriremos el grifo y mojaremos ambos brazos hasta el codo.
  2. Impregnaremos de jabón el cepillo. Si tenemos cepillo impregnado lo humedeceremos y empezaremos a limpiar de la punta de los dedos hacia el codo.
  3. Haremos movimientos repetidos de diez veces, salvo en uñas y codo que serán repeticiones de 20.
  4. Comenzaremos por uno de los brazos limpiando de la punta de los dedos hasta el codo. Se comienza por las uñas con 20 repeticiones, dedos, espacios interdigitales, dorso de la mano, palma, muñeca, antebrazo y codo. Enjuagaremos el brazo y el cepillo y pasamos al otro brazo. Repetimos la operación.
  5. Finalmente enjuagamos los dos brazos, cerramos con el codo el grifo y secamos minuciosamente las dos manos.

Colocación de las batas y guantes estériles

Tras el lavado de manos nos colocaremos la bata. Las batas quirúrgicas vienen dobladas al revés de modo que la parte que va a estar no estéril (en contacto con el cuerpo), es la primera que podemos tocar.

Existen dos formas de vestirse:

  • Técnica autónoma: Con dos dedos estiramos la bata e introducimos los brazos por las mangas. Un asistente no estéril nos abrochará por detrás, ya que esta zona se considera no estéril.
  • Técnica asistida: El asistente que ya está estéril y vestido presenta al otro operador la bata para ayudarle en la vestimenta. El auxiliar lo abrochará por detrás.

Enguantado

Iremos con los brazos hacia arriba a la zona quirúrgica. El asistente no estéril nos ha abierto un campo quirúrgico y la bata estéril. Las batas quirúrgicas vienen dobladas hacia fuera para facilitar la técnica autónoma de vestimenta. Introduciremos los brazos sin sacudir y el asistente nos abrochará. La parte posterior se considera no estéril.

A continuación, nos abrirán los guantes dejando el envoltorio interior al descubierto. Lo abriremos como si fuera un libro dejando los guantes al descubierto. Con el pulgar y el índice y en un único movimiento, deslizaremos la mano, cogeremos el borde del guante por el doblez e introduciremos la mano dejando el puño doblado.

Con esa mano meteremos en la solapa del otro guante para sujetarlo e introduciremos el otro guante en la otra mano de un solo movimiento. En ese momento ya podemos estirar el puño sobre la bata. Es muy importante no tener contacto del guante con la piel del brazo al colocarlo. Si es necesario ya se pueden ajustar los dedos. A partir de aquí ya podemos estirarnos los guantes por encima de la bata. Es sumamente importante desde este momento no tocar nada que no esté estéril. No podremos hacer cosas como ajustarnos la mascarilla ni tocar superficies sin recubrir. Si esto sucediera habría que cambiar los guantes. Ya podemos preparar el campo quirúrgico.

Comenzaremos por poner el paño estéril sobre la superficie donde vayamos a trabajar. El asistente no estéril nos irá abriendo el material sobre la mesa de mayo. Iremos colocando el material sobre el campo. Sin tocar el aspirador insertaremos la cánula quirúrgica estéril. Colocaremos los cubremangueras sin tocar nada que no sea estéril y tras hacerlo no podemos volver a colocarlo en el soporte habitual, pues se volvería a contaminar la aspiración. Sellaremos la parte superior para que no se caiga con un adhesivo.

Para cubrir las zonas de uso habitual como son las asas de la lámpara, o el motor de implantes, existen unas películas transparentes adhesivas estériles que nos ayudan a tal fin. Colocaremos la línea de irrigación estéril en el contraángulo y el ayudante no estéril lo conectará al suero fisiológico y al motor de implantes. En el caso de que se utilice irrigación externa es importante saber que el suero se contamina con la primera vez que introducimos la jeringa para absorberlo. Existen unos dispensadores de suero que irrigan de forma continua sin tener que contaminar el suero cada vez que lo pinchamos. Ha llegado el momento de pasar al paciente.

Antes de entrar el asistente no estéril le proporcionará las calzas, la bata y el gorro. El paciente ha de entrar ya vestido al gabinete.

En la sala, se le proporcionará un colutorio de clorhexidina al 0,12 % para que se enjuaque durante 60 segundos. A continuación, se limpiará la zona perioral con clorhexidina o con povidona yodada. Para hacerlo mojaremos una gasa en la solución y realizaremos movimientos en radio desde el centro de la boca a la periferia.

Continúa leyendo este post en Preparación de la cirugía en clínica dental – 3ª parte

FUENTE: Dra. Gema Maeso Mena. «Principios de Bioseguridad en la Clínica Dental» Editorial Peldaño Media Group. S.L. 2022

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